Glee es sin duda uno de los fenómenos televisivos del momento. Coincidiendo con la reanudación de la emisión de la primera temporada en USA, el canal Neox español ha comenzado también a emitir la serie desde el primer capítulo; la serie ya ha sido víctima de los caprichosos cortes publicitarios que Antena 3 impone a todos sus canales digitales. La serie va sobre un coro de instituto americano, un coro muy distinto de aquel en el que yo participara en mi juventud o de aquel que yo dirigiera a finales de los 90; pero aun así no he podido sustraerme a su embrujo.
Siendo una serie que discurre en un centro de educación americano, la presencia de productos Apple es constante, sobre todo de iMacs y de iPods que tienen los alumnos, pero en el episodio 10 titulado «Ballad», un MacBook Pro tiene un protagonismo especial.
Es difícil contar lo que pasa sin hacer un spoiler, pero digamos que Finn, el protagonista masculino de la serie, está pasando por un momento muy intenso emocionalmente, en el que los sentimientos parecen poder dominarle. Kurt, un chico gay compañero del coro secretamente enamorado de él, le aconseja cantar una canción al origen de su desazón.
No corto ni perezoso Finn se lanza a ello, y el montaje de la escena nos lo muestra cantando en el auditorio del Instituto y también en su habitación, dirigiéndose a su MacBook Pro 15′ donde hay una imagen de la fuente de sus tribulaciones. El momento es un poco ñoño, sobre todo porque la canción que canta es «I’ll Stand By You» 
, pero no deja de resultar un curioso product placement.
