Un usuario de productos Apple que haya llegado a este mundo hace un par de años jamás entenderá el dolor de cabeza que puede causar tener diferentes Apple ID. Para él todo es de color de rosa: vive en la casita de chocolate en el país de la piruleta y con su cuenta de iCloud sube, baja, cruza y salta por todo lo largo del ecosistema Apple.
Sin embargo, algunos tuvimos cuenta de iTunes antes de entrar en el mundo Mac, algunos venimos de la cuentas .Mac e incluso otros provienen de las iTools. Somos gente que hemos sufrido, hemos visto servicios caer y alzarse… y nuestro sufrimiento nunca tendrá fin.
Es fundamental saber que tu Apple ID es sólo un nombre y el hecho de que ese nombre sea una cuenta de correo no significa absolutamente NADA. De hecho, mi cuenta de iTunes fue durante muchísimos años «emilcar» simple y llanamente, y me juego algo a que mucha gente la conserva así por romanticismo. Sin embargo, al poco de entrar en la plataforma Apple, me creé una cuenta .mac, el antepasado de la actual iCloud, cuyo nombre era una cuenta xxx@mac.com. A partir de ahí ya comencé a tener dos cuentas separadas pero eso era normal, porque no podías usar tu cuenta @mac.com como cuenta de iTunes. De hecho, ese tipo de cuentas eran la excepción porque era un servicio minoritario, para nada obligatorio como ahora es iCloud.
Con el tiempo, y para evitar confusiones, puse a mi cuenta de iTunes un nombre convencional, esto es, con forma de correo electrónico, algo como «xxxx@gmail.com» igual que tendréis muchos de vosotros, y durante mucho tiempo continué funcionando sin problemas con ambas cuentas: por un lado @mac.com con los servicios de contactos, calendarios etc. y por otro lado @gmail.com como cuenta de iTunes.
Y entonces llegó iCloud.
Evidentemente, migré mi cuenta @mac.com a una cuenta de iCloud para seguir manteniendo los servicios y contenidos que arrastraba de las cuentas .mac y de MobileMe. También migré mi cuenta de iTunes a iCloud, pero esto lo hice por probar algunas cosas y no tiene la mayor relevancia en este artículo.
Apple es consciente de esta dualidad y de que no se puede fusionar Apple ID, repito no se pueden fusionar Apple ID, una vez más NO SE PUEDEN FUSIONAR APPLE ID, así que en la configuración de iOS y de OS X te permite poner cuentas de iCloud o Apple ID distintos para todo: puedes poner uno como cuenta de iCloud del dispositivo, otro para las compras, otro para compartir en casa, otro para iMessage, otro para FaceTime y otro para GameCenter. Es más, la cosa se perpetúa en el reciente Family Sharing, donde los miembros de una familia comparten a través de sus cuentas de iCloud las compras hechas… con su cuenta de compras, la cual no tiene por qué ser necesariamente la cuenta de iCloud.
Existe una tipología de usuario de iCloud que es sin duda de las que más abundan. Me refiero a un usuario que no tuvo nunca cuenta .Mac o cuenta de MobileMe, que tenía su cuenta de iTunes xxx@gmail.com por todo tener, y que un buen día le dijeron que tenía que migrarla a iCloud. Este usuario, al que llamaremos Jorge, empezó inadvertidamente a usar la sincronización de calendarios y de contactos, así como otras facetas de su cuenta de iCloud. Y vio que era bueno.
Un buen día, Jorge decidió que Google era el mal, seguramente influenciado por algún gurú de pacotilla, pero sobre todo por el hecho de que las cuentas Gmail funcionan fatal en dispositivos Apple, y decidió migrar a una cuenta de correo de iCloud. Acudió a su iPhone y activó la casilla de correo, y a los pocos minutos tenía su nuevo email xxx@icloud.com configurado y funcionando. Tras semanas de ardua migración, había conseguido usar su correo de iCloud como cuenta principal y ya sólo entraba ocasionalmente a Gmail cuando le apetecía leer cadenas de powerpoints con musicaza. Absolutamente entusiasmado por su gesta, Jorge decidió que ya no quería ver nunca más en su dispositivo iOS su cuenta xxx@gmail.com y procedió a entrar a https://appleid.apple.com/ para cambiarla de nombre, y darle el de su nueva cuenta de correo iCloud… pero no pudo.
Y es que existen tres SOLO TRES tipos de cuentas de iCloud.
– Las que vienen de cuentas anteriores .Mac o MobileMe cuyo nombre es una cuenta de correo electrónico @mac.com o @me.com y que cuentan con todos los servicios disponibles.
– Las creadas como nuevas en la era iCloud, similares a las primeras pero cuyo nombre es una cuenta de correo electrónico @icloud.com.
– Las que vienen de un Apple ID usado anteriormente como cuenta de iTunes, como la de Jorge. Estas tienen como nombre una cuenta de correo electrónico @gmail.com, @yahoo.es o lo que sea, y no cuentan a priori con los servicios de correo electrónico ni notas. Estos servicios se puede activar, y entonces el sistema nos permitirá crear una cuenta de correo electrónico @icloud.com asociada a nuestra cuenta iCloud, pero dicha cuenta sera sólo correo electrónico y no podremos usarla como nombre de nuestra cuenta.
Así las cosas, es perfectamente posible que nuestra cuenta de iCloud sea xxx@gmail.com y que tenga una cuenta de correo electrónico asociada xxx@icloud.com que no es ni será nunca nuestra cuenta de iCloud per se. Aunque funcione como identificador en correo electrónico, iMessage, GameCenter, FaceTime y todo lo que quieras, dentro de su corazón, nuestra cuenta de iCloud seguirá siendo xxx@gmail.com y sólo podremos cambiar este nombre a otro que sea otra cuenta de correo, pero nunca a xxx@icloud.com.
Y esto, que parece complejo, lo es aún más. Las cuentas de iCloud no son buenas recibiendo distintos tipos de contenido; Carlos Burges, de Faq-Mac.com, autor de diversos libros de éxito en la iBooks Store, recomienda que si vas a darte de alta en la App Store como desarrollador de apps o escritor de libros, crees una cuenta nueva exclusivamente para eso, ya que se han dado casos de caos absoluto por emplear para tal cometido un Apple ID ya en uso como cuenta de iCloud o simplemente como cuenta de compras para iTunes.
Por tanto, amigo Jorge, cesa en tu intento de hacer nada. Tu cuenta de iCloud es y será siempre xxx@gmail.com, aunque ahora tengas asociada a la misma una cuenta de correo xxx@icloud.com que uses para todos los servicios. Pero no te sientas mal por ello sino todo lo contrario: exhíbelo con orgullo como una cicatriz que muestre a las generaciones venideras que sí, tu luchaste en las Apple ID Wars.