Todo usuario de iPhone ha pasado en su vida por alguna de las fases que os detallo a continuación:
– Caos: cientos de apps desperdigadas por múltiples pantallas; ni te acuerdas de lo que tienes y mucho menos lo usas.
– Orden: todas las apps metidas en carpetas a puñetazos ocupando únicamente la pantalla principal del iPhone y como mucho una más; presencia de la carpeta «Juegos» y «Juegos 2». Sigues sin usar muchas aplicaciones.
– Minimalismo: influenciado por alguna captura de pantalla en Twitter, dejas en la pantalla principal sólo las apps que más usas y las demás van en carpetas en la segunda pantalla. Ninguna carpeta en la pantalla principal.
– Raquitismo: te convences a ti mismo de que con Evernote y el calendario tienes suficiente. Dejas el iPhone pelado como un abeto en febrero y sólo poco a poco vas instalando alguna app cuando ves que la necesitas. Presumes de escasez de apps ante tus amigos que están en otras fases.
Desde mi punto de vista, todas estas fases tienen algo en común y es que estás más preocupado sobre cómo disponer tus apps en el iPhone que sobre usarlas realmente. Yo ahora mismo podría decir que estoy en una fase de madurez, esto es, hago lo que me da la gana y sobre todo procuro usar mucho el iPhone y usar mucho las apps que tengo. Si veo que una app no la uso nunca y que la llevo en el teléfono casi por compromiso geek (como por ejemplo Google Earth) la borro sin compasión. Actualmente no sigo casi ningún patrón predefinido para organizar mis apps, más allá de lo que podéis ver en la captura que preside este artículo. Eso sí, tengo todos los juegos en una única pantalla y he dejado sólo los juegos a los que realmente juego, cuando antes tenía dos carpetas llenas.
Pero todo esto va realmente de usar el teléfono y de usar las aplicaciones. He pasado suficiente tiempo en las fases minimalista y raquítica como para darme cuenta que para disfrutar realmente del teléfono hay que usarlo, sacarle provecho y que realmente nos ayude en el día a día. No nos hemos gastado 600 y pico euros en un iPhone para tenerlo en el bolsillo ¿no?
Así pues, en esta serie de artículos voy a hablaros de apps que me han hecho volver a enamorarme de mi iPhone 4 y usarlo mucho más en el día a día. En algún caso estas apps os serán tremendamente útiles y en otro pensaréis que son una chorrada, pero a mí me están siendo todas de una inmensa utilidad.
Empezamos.